miércoles, 5 de septiembre de 2012

Atraco

Un golpe de aire en la puerta giratoria
del momento y de repente
un tipo alto sobre el asfalto aparece
a todos viendo, sí
incluso a ti
pedazo de alma
sobreviví, un poquito más.
No tenés por qué temblar.
Porque por ti no viene este verdugo
cuya no significa la capa nada
sino el exeso de dolor.

Viéndolo estamos estando allá
ha estado viéndonos
por algún rato ya.

Yo sólo me quedo,
yo sólo pretendo
que aún nos queda tiempo,
días que nos quedan aún nos prueban
que alguien aún nos está viendo.

Y podrías ver su rostro obscuro
que a un lado inclinándose lento
rehusaría a prestarte la vida más.
Podrías verlo
pero no este día
porque este día alguien aún nos está viendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario