miércoles, 6 de octubre de 2010

Siento que ahora ya no te pueda hablar, porque las cosas han cambiado. Quisiera estar contigo pero me he dado cuenta que no eres tú misma. Eres sólo un holograma. A veces me gustaría asirte, aunque sabes que para mí todas son impalpables, sus cuerpos, para mis manos, son volátiles. Así ha sido desde que tengo memoria.

Creo que lo que me hechiza de tí no eres tú, sino tu parte abstracta, tu cuerpo astral. Esa mezcla de emociones universales que se combinan en una manera tan bella. Cuando dices palabras para armonizar nuestra conversación, oigo una voz conocida dentro de mí. Es como el eco de mi voz. Y ese sonido entra, cristalino, en mi ser. Estando adentro puedo sentir que no hablo contigo en la realidad. Hablo contigo en una ilusión.

1 comentario: